Star Wars es un fenómeno cultural de escala incomparable, algo que se hizo evidente con la preparación para el estreno de El Despertar de la Fuerza, séptima película de la saga y la primera en diez años. Dejando olvidado el sabor amargo de las precuelas, y a favor del regreso de los héroes originales, J.J. Abrams cumple con las expectativas y devuelve la picardía y los estándares primitivos a la nueva película, aunque con algunos puntos débiles y espacios por rellenar que generan varias preguntas sobre esta nueva interpretación de la epopeya cósmica.
En El Despertar de la Fuerza, la base de la trama es similar a la de la Star Wars original (luego llamada Una nueva Esperanza): un conjunto de personajes desarraigados se embarcan en un viaje personal en medio de una batalla galáctica entre el bien y el mal.
El lado oscuro está encarnado en la Primera Orden, organización que adquirió fuerza sobre la galaxia tras la caída del Imperio en los 30 años que pasaron, cronológicamente hablando, desde que vimos a los héroes originales en El Retorno del Jedi. Kylo Ren (Adam Driver), líder de la Primera Orden, está diseñado por Abrams para ser el Darth Vader de las nuevas generaciones, con el personaje mismo adorando al ícono caído y jurando terminar lo que aquel empezó. Sin embargo, el guión (co-escrito por Abrams, Lawrence Kasdan -veterano guionista de StarWars- y el ganador del Oscar Michael Arndt) lo retrata como un adolescente quejoso y encaprichado cada vez que no se sale con la suya. Quizás sea el punto más débil de la película, la falta de intimidación del villano principal y sus flojas motivaciones para llevar adelante su deseo de terminar con los guerreros Jedi.
Afortunadamente, lo que El Despertar de la Fuerza carece en villanos amenazantes, lo compensa con la nueva camada de héroes. En primera instancia, la historia nos presenta a Poe Dameron (Oscar Isaac), el mejor piloto de combate de la Resistencia, aquellos guiados por la General Leia Organa (Carrie Fisher). Isaac hace de Poe Dameron un personaje irresistible, encantador, con reminiscencias del Han Solo de Harrison Ford en la trilogía original. Sin embargo, el foco está puesto en los protagonistas más jóvenes, las caras frescas de Daisy Ridley y John Boyega. Ridley se luce excepcionalmente en el primer papel de su carrera en el cine, interpretando a la heroína Rey, una joven chatarrera que resulta cautivante desde el momento en el que aparece en pantalla, llena de coraje, espíritu y personalidad. En cuanto al personaje, y basándonos en los guerreros Jedi originales, su poderosa relación la Fuerza, desconocida por Rey hasta adelantada la trama, genera dudas sobre su origen y falta de entrenamiento. Por su parte, John Boyega interpreta a Finn, un Stormtrooper en crisis que inicialmente sólo quiere salvarse y escapar de la Primera Orden. Es un excelente giro para la historia el ver a un personaje iniciar como un cobarde y seguir los pasos del camino del héroe hasta convertirse en uno, evolución que Boyega lleva a cabo de manera extraordinaria. Más importante aún es el vínculo que desarrollan Rey y Finn, que se siente remarcablemente real, siendo estos personajes el corazón de la película, logrando ponerla en marcha.
La combinación de lo viejo y lo nuevo funciona. El regreso de los personajes interpretados por Carrie Fisher, Harrison Ford y Mark Hamill sirven como conector emocional pero poco se sienten como remanentes de algo que ya pasó hace mucho, sino que su inclusión fluye y son una parte indispensable de esta nueva trilogía. Es notorio que Abrams respeta la franquicia y resulta triunfante en la inclusión de detalles de las películas originales, por momentos un poco alevosos como guiños para los fans y poco relevantes para el relato, pero sin embargo disfrutables.
A pesar de sus pequeñas falencias, El Despertar de la Fuerza resulta en una aventura muy agradable y vigorosa a la que da gusto volver. Personalmente, espero que huecos sean retomados por Rian Johnson en el próximo episodio, principalmente sobre Kylo Ren, ya que conocemos su origen pero su ambigüedad con la Fuerza es confusa, y su personalidad hace que nos preguntemos qué pasó para elegir el camino del lado oscuro. Por el momento sólo podemos teorizar al respecto, mientras tanto, El Despertar de la Fuerza genera ansias de otro paseo con Rey, Finn y la pequeña y carismática maravilla que es BB-8.
1 comentarios:
Increible reseña muy de acuerdo en todo, ahora a contar los dias para la siguiente!
Publicar un comentario